lunes, 31 de marzo de 2008

Mentiras y Verdades de un Viernes en la Riviera

A los veinte minutos de entrar en la Riviera, me entró la sed y fui a por un par de vasos de cerveza. Cuando los llevaba hacia el grupito [un grupito de destacada excelencia, por otra parte] el escalofrío que sería mi constante de la noche, empezó en los brazos. La gente bramaba y los músicos empezaban a tomar sus posiciones. Un tirón de mi brazo y avanzo dos filas más para entonar a coro con ese pequeñín [más que yo] grandísimo artista algo que empezaba con "y aunque creí que nunca más".

Documento gráfico que demuestra que Iván es más pequeño que yo.


Dos horas increíbles. Increíbles. Una intensidad que, a mi parecer, poca gente puede dar a su música como lo hace Iván Ferreiro, unida a un repertorio que crece en tamaño y calidad con cada disco, y con la presencia de una banda que sigue la misma tendencia. Era de esperar que a todos se nos cayera el alma a los pies y luego volviera a subir al cielo con la voz y la interpretación de Iván, pero ver a su banda vivir las canciones al mismo nivel, fue una muy grata sorpresa, sobre todo a ese chaval, Emilio Sáez, que a ratos golpeaba la guitarra con la rabia y la intensidad estridentes de las canciones que tocaba...

Hubo muchos momentos para enmarcar. En cuanto a canciones, me quedo con Mrs P, Fotogramas y, por supuesto, Turnedo. Las dos primeras porque cambian en directo, no son la misma, tienen otra fuerza, en Mrs P, esa fuerza se conoce, se sabe que la canción la tiene, pero el directo la extiende, la prolonga y hace que posea a la canción de un modo nuevo, misterioso y embaucador. En Fotogramas, la fuerza es una revelación, es como algo que te pregunta si te has parado a pensar lo que se te está diciendo cuando se te cuestiona "si es cierto que ves pasar fotogramas que enseñan tu vida en un solo segundo". Y Turnedo es la expresión más pura que puede haber de la comunión entre Iván, Amaro y todos los que estamos ahí abajo, desesperadamente enérgicos cuando nos preguntamos "quién no tiene valor para marcharse", y con la más larga de las sonrisas cuando acaba la canción cantando un delicioso trocito de Diecinueve.

Los hermanos Ferreiro dejándose la piel en el escenario. También hay un Mac!

Otra prueba de la conexión que existe entre Iván y nosotros que vivimos sus canciones, es que a nadie le importara que se equivocara con la letra de Rocco, a mí hasta me hizo ilusión pensar que se podía estar poniendo nervioso al tocarla para nosotros. Le aplaudimos más que nunca y siguió, y a cambio, él nos regaló un trocito de Tío Vivo e Inerte, todo ello tocado simplemente al piano. Eso fue magia.

Y comentaba algún repelente que Magia, del nuevo disco, no tenía gancho en directo. No es lo que yo vi, me encantó ese vals con el acordeón de César Pop incluido. Un vals, que como en tantas otras canciones que canta el gallego, no es lo que parece.

Típica pose extraña de Iván

Por lo demás, algunas colaboraciones más, Coque Malla, una tal Adela a la que no se oyó nada y el mismísimo Suso Sáez a la guitarra en varias canciones. Y, lo más importante de todo, una compañía excelente a mi alrededor, tanto que muchas veces me olvidaba de lo que estaba pasando en el escenario y me giraba para berrear unas canciones significativas para mí y para ellos, con una complicidad tan densa que lograba abstraer de aquello tan grande que pasaba sobre nosotros.

En fin. Genial. Escalofrío recurrente, entrega absoluta ante la grandeza de un artista que transmite como pocos, un repertorio que se podía paladear y del que hasta lo peor sonaba bien, y poquísimas ganas de abandonar una sala en la que se había vivido tanto en tan poco tiempo. Pero salimos, y el resto de la noche también valió la pena, aunque eso, como se suele decir, es otra historia.

Y es curioso, pero voy a acabar este artículo sin decir ninguna mentira. Aunque supongo que, como dice el propio Iván, habré mentido sin querer contando mi verdad.

A esto me refería con todo el tema de la intensidad...


~/Iván Ferreiro/~/La Distorsión/~

miércoles, 26 de marzo de 2008

Ni tan típica, ni tan pastel, ni tan tonta

Por circunstancias de la vida, recientemente he ido a ver dos veces la misma película al cine. Hay varios factores por los que ir a ver dos veces una película al cine. Considero que Ellen Page es uno de ellos. Otro es que te sobre el tiempo y no haya muchas más cosas interesantes en la cartelera. Otro es que la peli en cuestión tenga su punto y soporte holgadamente más de un visionado. Supongo que lo mío ha sido una mezcla de estos tres [cambiando en el segundo de ellos la desidia por la casualidad]. Sea como sea, lo mínimo que puedo hacer después de ver dos veces la misma película en el cine, es hablar de ella en mi blog...

Juno

Para el que no lo sepa, Juno va de una moza homónima de dieciséis años, interpretada por una más que excelente Ellen Page [tal vez la conozcáis por ser la Gatasombra de la horrible X-Men III, la decisión final o puede que de Hard Candy, peli que no he visto aún, pero está en mente] que se queda embarazada y decide dar a su churumbel en adopción. Vale, hasta aquí tenemos el típico drama pastelón y tonto. Pero, al igual que pasa con Una Chica de Jersey, de Kevin Smith, la peli no resulta ni tan típica, ni tan pastel, ni tan tonta [de hecho, a mí no me pareció tonta en absoluto].
El personaje central de la película se come la cinta entera. Con un sentido del humor descarado que engancha, unos gustos peculiares pero muy definidos y una madurez inadecuada que se calza en su piel como un guante ceñido [la metáfora runa del día], Juno consigue que nos baste su presencia para que la sala de cine esté llena. Igual influye mi incondicional amor platónico por la actriz que la encarna, pero la verdad es que vi en el personaje una conjunción increíblemente creíble de pueril madurez.

Además, las actuaciones del resto del reparto no desmerecen a la de la señorita Page, incluso Bleeker el crío sosón que la deja embarazada, interpretado por Michael Cera, resulta natural en su comportamiento forzado. La única posible excepción es Jennifer Garner, que interpreta a la madre adoptiva del bebé, manifiestando solamente dos registros de expresión: tensa y pastel, y ninguno de ellos parece del todo auténtico.

¿Más puntos a favor de la peli? Varias conversaciones geniales sobre música y pelis de serie B, una banda sonora de las que te hacen salir tarareando del cine y, maldita sea, una larga sonrisa que se prolonga a lo largo de toda la película, que a veces es lo que más importa y lo que más cuesta conseguir...

Y, para concluir, goza de una belleza circular, que, como sabréis los que pasáis de vez en cuando por aquí, es una cosa que me encanta.

~/Barry Louis Polisar/~/All I Want is You/~

domingo, 23 de marzo de 2008

Freak Expansion

Hay veces en la vida que uno tiene que reconocer que es friki. A mí ya me pasó hace tiempo, no me importa. Recientemente, tres nuevos factores hacen que pueda reafirmarme como lo que soy [qué narices, como lo que casi todo el mundo es últimamente]. Empecemos.

WoW

Lume, el Pícaro Elfo Nocturno, ya está repartiendo estopa con nivel 49 en el World of Warcraft. Y la verdad, es que estoy relativamente decepcionado. El juego está bien, pero se puede llegar a hacer MUY aburrido. Sobre todo si vagabundeas en soledad por el mundo, que, tristemente, es lo que he hecho yo casi todo el tiempo hasta ahora.

He aquí a Lume, el del WoW, y su fiel corcel gatuno

El caso es que pese a todo, me cuesta entender por qué no entré antes en el WoW, ¿por qué? Tiene ciertos rasgos que hace que aparentemente sea un juego hecho para mí:
  • Aparece en un capítulo de How I Met Your Mother.
  • Es una mezcla de dos de los juegos a los que más he jugado [sin contar quinitos]: el Warcraft y el Diablo.
  • Es una forma más entretenida de mantener contactos que hablar por el Messenger o mandar mails.
Dicho esto, ya veremos cuánto duro.

Wii

Oh, yeah. Mi casa madrileña está ascendiendo al cuadrante mágico de la escala de coolness//freakiness [algún día profundizaré en ese concepto]. Tenemos una Wii y la tele está en camino. La Wii sin la tele pierde mucho, claro. Pero la hemos probado en Valladolid y es increíble. Por cierto, ¿sabíais que el nombre viene del pronombre inglés “we” y la afirmación francesa “oui”? Las dos íes representan, además, a dos personas jugando. Curioso.

He aquí a Lume, el Mii de la Wii, casi fiel al Lume original, aunque menos atractivo

Facebook

Sí, después del intento fallido que fue el WAYN, vuelvo a probar una de estas extrañas redes sociales que tan de moda están. No estoy seguro de que facebook sea la mejor opción, porque al parecer Tuenti va a entrar petándolo… Pero hay lo que hay, Xabi, que ha estado este fin de semana en Pucela, me ha dicho que Facebook, pues Facebook. Una vez más, ya veremos cuánto duro. Si me parece un tema interesante, igual lo veis en el InformeSobre LoQueMola. Y si no, en el de LoRuno.

En el Facebook todavía no tengo imagen


~/Michael Cera And Ellen Page/~/Anyone Else But You/~

jueves, 13 de marzo de 2008

Y Aunque Creí que Nunca Más...

... pondría en el blog la letra de una canción [porque así me lo había prometido a mí mismo], falto a mi promesa en vistas de que ayer hubo gente que tropezó por aquí buscando trozos de uno de los nuevos temas de Iván Ferreiro [me lo ha dicho Google Analytics]... Y en vistas de que es un temazo, qué narices.

Toda La Verdad

Y aunque creí que nunca más
sería capaz de comenzar
la fantasía es una vía.
Y comencé a recuperar
algunos trozos rotos
y una parte que aún está vacía.
De dos en dos fueron llegando
hasta la puerta
y luego se esfumaron... sin avisar.

Sólo hay mentiras y con ello
lo que quieres es decir
toda la verdad.


Son nuestros días olvidados
esos besos que se dan
y que al siguiente ya no están.
Si cada noche que dormí,
cada minuto que pasamos
sin hablar desaparecen.
Repetiré como yo quiera
ese minuto que viví
y no me importa si hay rigor.

Sólo hay mentiras y con ello
lo que quieres es decir
toda la verdad.
Sólo hay mentiras y con ello lo que quieres es decir toda la verdad.

Y aunque creí que nunca más, y aunque creí que nunca más...

[Iván Ferreiro, en Mentiroso Mentiroso]

miércoles, 12 de marzo de 2008

SínDroMe

Estoy experimentando el síndrome del folio en blanco. Uno de tantos síndromes de esos que no gustan, pero a los que algunos estamos muy acostumbrados.

Me siento y pienso que tengo que poner algo en mi blog. Es una obligación. Deja de apetecerme. Ahora pienso en qué me apetece. Escribir. Decido que sería conveniente que lo hiciera para el blog. Se cierra el círculo, se obra el engaño…

Y entonces es cuando experimento el síndrome del folio en blanco. No es grave, lo tengo controlado, basta con pensar en él para hilarlo con otros temas. Cruzan mi cabeza otros síndromes. Mi preferido es el de la felicidad aplazada, al menos desde hace unos días. Es tan irritante saber que está ahí, saber que está mal y saber que no lo vas a cambiar, que sólo tienes dos opciones: o te odias, o le coges cariño. Y odiar da tanta pereza…

Últimamente la felicidad aplazada viaja conmigo donde quiera que voy. Muchas veces parece que no vamos a caber los dos en el metro, pero cabemos. Hoy, mientras pensaba que sería muy funcional [aunque poco elegante] venir a trabajar en bici, me olvidé de que sería complicado llevar mis síndromes de paquete. Al final pesan.

Pero en realidad todo está bien. Pierdo las horas con cosas que a ratos me interesan muy poco, pero a ratos me apasionan. La felicidad aplazada te muestra senderos que el “aquí y ahora” oculta. Vías que nunca pensarías en tomar si jugaras a coger lo que quieres tener. Yin Yan.
Además, ya se encargan otros síndromes de impedir que me líe con jueguecitos.

~/Nada Surf/~/All is a Game/~

De nuevo Miller, de nuevo Wayne

Dicen que está considerado uno de los mejores comics de la historia. He leído demasiado pocos para dar crédito a esta aseveración, pero ciertamente es uno de los mejores que han pasado por mis manos. Una vez más, no estoy hablando de algo que esté de moda. Hablo de algo que está en mi PSP esperando a que lo lea por tercera vez y que vino a mi cabeza después de escribir el otro día sobre Año Uno. Porque vuelve a tratarse de Batman.

El Regreso del Señor de la Noche

De nuevo es Frank Miller el que firma una de las mejor narradas y más originales historias del hombre murciélago [¿habéis pensado alguna vez en lo runos que suenan los nombres de superhéroes cuando los traduces al castellano? Hombre Murciélago, Súper-Hombre (o lo que es peor Hombre-Súper), Hombre Araña…]. Ésta también tiene sus añitos, data de 1986. Está ambientada en un futuro-pasado poco alentador en el que los superhéroes han colgado la capa, salvo Superman, que trabaja para un gobierno opresor en lucha con la Unión Soviética. Dicho esto, el resto de la sinopsis se puede deducir del título: Bruce Wayne decide volver a las andadas.

¿Por qué El Regreso del Señor de la Noche es genial? Al margen de tener un estilo propio realmente atractivo y adictivo, el argumento tiene unos ganchos que lo hacen brillar:
  • Batman pasa del medio siglo de edad. Todo lo que hacía interesante al héroe en Año Uno se da la vuelta para hacerlo interesante en El Regreso del Señor de la Noche. Saboreamos aquello de que la experiencia es un grado en cada viñeta, y nos encanta.
  • Hay un montón de caras conocidas para el aficionado veterano, sin que en ningún momento dé la sensación de que algo ha sido metido con calzador. Todo cuadra en un argumento redondo.
  • Sin dejar de ser una historia maniquea, los buenos no son tan buenos, y los malos… Bueno, la mayoría de los malos sí son muy malos.
  • El personaje de Batman está desarrollado a un nivel realmente profundo. Es tenebroso, siniestro, decidido y afronta su irrevocable destino con una determinación realmente épica.
Pues eso, una obra de arte. Os dejo con una de las portadas, que refleja el que para mí es el gran momento del cómic.


~/Iván Ferreiro/~/Turnedo/~

lunes, 10 de marzo de 2008

Entrada Sin Fotos

Como la semana pasada acabé ignorando parcialmente mi estupenda e inflexible estructura de publicación, esta semana también me veo obligado a comenzar de un modo poco convencional...

Lately...

La semana pasada se habló de dos cosas. Bueno, algunos hablamos incluso de tres o cuatro, pero una o dos no son de dominio público. A lo que iba, ¿qué cosas? Eurovisión y las Elecciones Generales. Hay gente a la que seguramente Eurovisión se la sople [tristemente, también habrá gente a la que las Elecciones se la sople], pero el caso es que es un tema que está ahí y este año va a ser un evento interesante. Porque este año haremos el ridículo como siempre, pero [y aquí está la novedad] esta vez lo haremos a posta. Dicho esto, quisiera aclarar que yo hubiera preferido ver a Guille Milkyway representándonos en tan peculiar festival, que además al chaval seguro que le hace ilusión [¿no decía en Cerca de Shibuya algo así como "me inundaré en sonido Eurovisión"?], me queda el consuelo de que el haberse quedado tan cerca baste para poder escuchar La Casa Azul alguna vez en algún bar.

Sobre el otro tema, hay tanto de qué hablar que estoy por no empezar. Se decía por ahí que "Si tú no votas, ellos vuelven", y no es que no esté de acuerdo, que lo estoy, pero soy un fuerte detractor del voto útil [desde hace poquito, eso sí]. No creo que sea una buena idea basar el ejercicio democrático en votar a una opción poco convincente para que no gobierne otra aún menos convincente. El voto, una vez echado en la urna, no lleva apelativos, es un voto punto, es un apoyo a un partido. Y esta vez ningún partido [que yo conociera con suficiente profundidad] merecía mi apoyo. Dicho esto, sólo queda esperar a que empiecen las discusiones sobre cosas que no le importan a nadie para saber si lo que ha pasado es bueno o malo.

Para terminar con esta parte, me queda narrar el gran momento de la semana pasada. Contexto: más de medianoche y un pobre desgraciado [para serviros] sale de trabajar y se encuentra con una multitud frente al Bernabéu. Después de tirar la caja de la pizza que llevaba de una mano, aún cargando con los resultados del análisis médico de la empresa
y vestido con mis mejores galas [elegante que curra uno, qué se le va a hacer], me aproximo a la multitud. Era el Chiki Chiki. Cansado que estaba después de una semana horrible, no pude quedarme a ver el show que había preparado Buenafuente en la capi, pero al menos pude sonreír un poco, que falta me hacía...

Later On...

¿Y qué nos deparan los próximos siete días? A mí estrés, pero en dosis digeribles, espero. Cierre de proyecto y comienzo de vacaciones. Me sabe mal que me vaya a ir de donde estoy sin hacer la parte más importante de lo que tenía que hacer. C'est la vie, me hago mayor y hacer chorradas cada vez parece más serio. Cosas mías, no hace falta que se entienda todo siempre, ¿no?

Sobre el blog... Igual ésta es la semana en la que lo mando a la m**rda [¿autocensura?, y eso que hace poco me criticaron por recurrir a ella...]. Estoy perdiendo la ilusión, ¡qué le voy a hacer!. Paciencia, decía uno de los diez consejos aquellos... Pero no tengo mucha y la que tengo la uso para otras cosas. Bueno, ya iremos viendo lo que sale.

Me despido con un pronóstico de esos que se aciertan fácil: Noches sin Luna pasará a tener un formato más austero a partir del momento en que de a publicar. Eliminaré el color morado [herencia pucelana] de las puntualizaciones entre corchetes. En el fondo quedaba un poco hortera, qué se le va a hacer.

~/La Casa Azul/~/La Nueva Yma Sumac/~

sábado, 8 de marzo de 2008

No ha sido una buena semana. Ya no para mí, que no lo ha sido, sino tampoco para este extraño país en el que vivimos. No quiero dar la sensación de frivolizar con algo tan triste, dramático y patético como es que alguien tenga que morir por las ideas de otros. Sin que exista más razón que el que otros puedan ejecutar su retorcida y cruel forma de hacer política. Nunca entenderé cómo puede existir gente con tanto odio dentro.

jueves, 6 de marzo de 2008

Tres Nombres

De las cosas que he visto y leído estos días por la blogsfera y demás derroteros, me quedo con tres nombres propios. Uno ya lo mencioné ayer, los otros dos no os dirán nada a la mayoría. Son un creador, un héroe y un artista. Y uno de ellos no está de rabiosa actualidad, a decir verdad, pero merece un homenaje. ¿Empezamos?

Adiós a un Creador

Gary Gygax nos dejó el pasado martes, a la edad de 69 años. Fue uno de los creadores de Dungeons & Dragons. Personalmente, sólo tenía noción de su existencia por un capítulo de Futurama, pero eso no es óbice para que haya disfrutado con un universo que salió de su cabeza. Somos muchos los que le debemos muchas horas de diversión al Sr. Gygax, sólo puedo decir adiós y gracias.

Me enteré por Giant On the Playground y leí más del tema en Microsiervos, donde encontré un enlace a algunas últimas palabras de jugadores de rol, gracias al cual me pude reír un rato en un duro día de curro [aviso a navegantes: será difícil disfrutar de ese artículo si nunca habéis participado en juegos de rol].






Héroes

De nuevo a través de Microsiervos me llegó al reader una historia que logró impactarme, la de Stanislav Petrov. Si lo buscáis en la wikipedia, sabréis cuánto debemos a este teniente coronel del ejército soviético. Gracias a su buen juicio pudo evitarse una guerra nuclear que no habría tenido ganadores.

La gente no empieza una guerra nuclear con sólo cinco misiles

Supongo que muchos, al igual que yo, no conocían su historia. En 1983 [gran año], un error informático hizo creer al ejército soviético que la URSS estaba siendo atacada por cinco misiles nucleares estadounidenses. El Sr. Petrov, en el que pudo ser el gesto más cargado de fe y buen juicio de la historia, evitó que la URSS respondiera a este supuesto ataque, asegurando que debía tratarse de algún tipo de error.

Su decisión evitó, sin lugar a dudas, la III Guerra Mundial.

Artistas en el Siglo XXI

Ya mencioné ayer el nuevo trabajo de Iván Ferreiro. Independientemente de que os guste o no os guste este pequeño gran artista, hay algo realmente llamativo en lo que está haciendo, a nivel de modelo de negocio. Todos sabemos que los tiempos cambian y que la tecnología consigue que nada sea lo que antes era. La de la música es una de las industrias más impactadas por la aparición de Internet y, mientras algunos buscan soluciones en cánones injustos, otros asumen la necesidad de ajustarse a la nueva situación del mercado.


Hay, posiblemente, ejemplos más claros de grupos que se adaptan al nuevo modelo de negocio que imponen los tiempos que corren, pero la iniciativa de Iván me parece suficientemente buena. Su disco se puede escuchar en su web y, el próximo fin de semana, se podrá descargar durante dos días. A cambio, lo que se venderá en las tiendas será una edición limitada que incluye un cómic ilustrando cada canción. ¿Qué voy a decir yo de esta iniciativa si va a aunar una de mis principales aficiones con uno de mis artistas favoritos? Encantado me hallo.


~/Iván Ferreiro/~/Más de una Vez/~

miércoles, 5 de marzo de 2008

Mentiras y Verdades

Estoy escuchando lo nuevo de Iván Ferreiro, me encanta y me acuerdo con alguna de sus frases de algo que dijo el padre de Evey Hammond sobre los artistas, los políticos y las mentiras. Y me acuerdo de algo más, que tiene que ver con mis propias verdades y con las mentiras de los demás.

Mentiras

"Los artistas mienten para decir la verdad, el politico para ocultarla". Muchas veces también dicen verdades para ocultar la verdad. Datos, números, porcentajes, gráficas, índices. Los políticos conocen el ancestral arte de hacer mentiras con las verdades, tenemos la dudosa suerte de haber presenciado un sinfín de espectáculos de este tipo, dos de ellos muy recientemente. Y los hemos ido a ver en masa, y nos hemos creído partes. Y otras partes nos han hecho ver y entender lo que hay al final del túnel.

Y lo que hay es lo que ha habido siempre, y no es lo mismo para todos. Para los que sabemos que no nos van a convencer, sólo hay tinieblas. Para los que están ya convencidos, no importa demasiado lo que haya, lo van a dar por bueno si les lleva el que les tiene que llevar. Y los que, siguiendo al otro, se pierdan por el camino, verán lo mismo que nosotros. Pero nunca serán de los nuestros, porque sus lealtades y las nuestras no apuntan hacia el mismo lado. Porque a nosotros ni dos, ni cuatro letras nos pueden decir lo que debemos pensar.

Porque el partidismo tiene una herencia arraigada más en el fútbol que en la democracia.

Toda la Verdad

"Sólo hay mentiras y con ello lo que quieres es decir toda la verdad" o al menos lo intento cuando, igual que los artistas, miento para decir la verdad. Creo que acabo de hacerlo. Creo que me ha gustado.

~/Iván Ferreiro/~/Toda la Verdad/~

martes, 4 de marzo de 2008

El Poder del Miedo

Dentro de poco tendremos la secuela de la que para muchos es la mejor película de Batman hecha hasta la fecha, Batman Begins. Y digo para muchos, pero no digo para mí, yo me quedo con la primera, de Burton. Una de las razones por las que la versión de Christopher Nolan me dejó algo frío fue que me esperaba encontrar algo parecido al sensacional comic en el que había oído que estaba basada, ese cómic es...


Batman Año Uno


Publicado en el 88 por DC y escrito por el gran Frank Miller este cómic nos cuenta los inicios de uno de los superhéroes más famosos de todos los tiempos. ¿Qué tiene de especial Batman Año Uno? Pues varias cosas:
  • Nos presenta a un héroe inexperto, que recibe muchas tortas. En el fondo nos gusta que los buenos lo pasen mal y que hagan mal las cosas, hace que nos creamos sus historias y eso está bien.
  • He ahí el segundo punto: nos podemos creer a Batman como no nos podemos creer a casi ningún otro superhéroe. Batman no tiene poderes de ningún tipo, sólo tiene un propósito, determinación y fondos.
  • Pero lo realmente especial de Año Uno no es sino la forma en que pone en relieve la principal de las armas de Batman: el miedo.
Batman Año Uno habla del poder del miedo y de los sitios en los que éste reside: lo desconocido, lo antinatural, los símbolos... Son varias las escenas en las que se juega con esto, de hecho, es uno de los hilos conductores principales de la historia. La que he dejado debajo de estas líneas es una de mis preferidas. Las percepciones engañan y Miller las usa muy bien en este espléndido cómic.

Supongo que muchos pensaréis que no hay nada que os pueda aportar un cómic de superhéroes, tal vez Año Uno pueda romper ese prejuicio si le dáis la oportunidad.

[Por cierto, nada que ver con la peli, salvo un par de escenas o tres. Por ejemplo, el torpe inspector Gordon de Batman Begins no es ni la sombra de la sombra del que nos encontramos en Año Uno]


~/Los Planetas/~/Política Celestial/~

lunes, 3 de marzo de 2008

Parte X - ¡Vamos muchachada!

Como dijo Sabina, al final, por fin el fin. Y para dotar a este decálogo de la ascensión de una belleza circular, algo que para mí es fundamental, me apoyo en el último consejo de la lista, incitar a la participación, para preguntaros qué os ha parecido este extraño ejercicio que he venido manteniendo las últimas semanas. Yo, por mi parte, me lo he pasado bastante bien, dentro de lo inherentemente ridículo de esta actividad.

Próximamente, en Noches sin Luna

¿Qué nos depara la semana? Esto es todo lo que me atrevo a aventurar.

  • Recomendaré un gran comic que ya tiene unos añitos y en el que se basó una película casi reciente.
  • Seguramente hable de cosas de mayores, ya que en pocas horas volveré a estar indignado por el panorama político en el que vivimos.
  • Curraré como un capullo, porque a finales de semana tenemos entrega.
  • Tendré morriña, cosas que pasan.
  • No será la semana en la que rompo la dinámica de post diario del blog [casi seguro que no].


~/Placebo/~/Haemoglobin/~